Sé que decidir estar juntos será más fácil que todo lo que vendrá después, pero no importa. Porque valdrá la pena o mejor dicho el sacrificio, los cambios, las discusiones, las alegrías, las ilusiones, las desilusiones, los desvelos, las risas, los abrazos, la compañía, valdrá todo. Vamos, arriesguémonos y atrevámonos a ser felices juntos. Y con ‘felices’ no me refiero a un ‘estado de éxtasis permanente’, me refiero a compartir de ahora en adelante las alegrías, risas, compañía, calor, abrazos, besos. Todas esas pequeñas cosas que hacen que nuestra vida sea feliz. PD: Te invito a ser mi compañero de vida, mi amigo, mi amante, mi cómplice.
Como seres humanos estamos atados al tiempo , segundos, minutos, horas, días, semanas, meses y años.... un ciclo rutinario. Sentimos el tiempo que pasa muy rápido cuando nos estamos divirtiendo o cuando estamos con algún ser querido; el simple hecho de sentirnos bien hace que nos olvidemos momentáneamente del tiempo. Mientras que por el contrario, sentimos que el tiempo pasa sumamente lento cuando estamos esperando o estamos incómodos. El tiempo nos hace crecer, nos hace madurar, nos hace ver las cosas de otra manera. Lo único es que no todos aprendemos de la misma forma ni al mismo tiempo, a algunos les cuesta más años que a otros entender ciertas cosas. Al fin y al cabo creo que puedo decir que el tiempo es un buen maestro.
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