Resiliencia

¿Resiliencia,   
la clave para sobrevivir las situaciones difíciles?

 

  La Resiliencia (del verbo latino resilio, resilire: «saltar hacia atrás, rebotar»).

Es un fenómeno ampliamente observado al que tradicionalmente se ha
prestado poca atención, y que incluye dos aspectos relevantes: resistir el suceso
y rehacerse del mismo (Bonanno, Wortman et al, 2002; Bonanno y Kaltman, 2001).

    Este fenómeno se considera inverosímil o propio de personas excepcionales (Bonanno, 2004) y sin embargo, numerosos datos muestran que la resiliencia es un fenómeno común entre personas que se enfrentan a experiencias adversas y que surge de funciones y procesos adaptativos normales del ser humano (Masten, 2001).

    Otra definición complementaria y relevante explica lo siguiente: la resiliencia distingue dos componentes: la resistencia frente a la destrucción, es decir, la capacidad de proteger la propia integridad, bajo presión y, por otra parte, más allá de la resistencia, la capacidad de forjar un comportamiento vital positivo pese a las circunstancias difíciles. (Vanistendael.1994)

    Desde el punto de vista de la psicología, la labor del psicólogo es la de reorientar a las personas, para que estas puedan encontrar la manera de aprender de la experiencia traumática y progresar a partir de ella, teniendo en cuenta la fuerza, la virtud y la capacidad de crecimiento de las personas.

   Actualmente la resiliencia es considerada como una forma de psicología positiva no encuadrándose dentro de la psicología tradicional. 

    Pretendiendo responder la pregunta planteada anteriormente, es primordial considerar que, como consecuencia de las diversas situaciones difíciles que se pueden presentar en el diario vivir; la acumulación de ellas puede hacernos tener una actitud negativa frente a los cambios o hacia el porvenir. Tendemos a guiarnos por cómo nos fue en un pasado y a esperar esos mismos resultados negativos en un futuro.

   Al encontramos ante una situación difícil, tenemos dos opciones esenciales, dejarnos abatir por la situación, o aprovecharla, hacernos fuertes y salir adelante. Transformar lo negativo en algo positivo. La base de la resiliencia radica en la capacidad de tomar una decisión; decidir ser fuerte.

    Si, la resiliencia puede ser un elemento clave para sobrevivir y sobrellevar las situaciones difíciles, debido a que ella, es la que proporciona a algunas personas la capacidad de reír y sonreír, aunque por dentro puedan estarse desmoronando.

   Ver las cosas desde otra perspectiva y poder resaltar lo bueno sobre lo negativo. Decidir seguir adelante “a pesar de…” y tomar aun las cosas negativas como una lección de vida que te prepara para ser mejor persona. Eso es básicamente la resiliencia.

 

“Lo que no me mata me hace más fuerte”

-El Ocaso de los ídolos de Friedrich Nietzsche-

“Sólo en la medida en que nos exponemos a la aniquilación una y otra vez

podemos hallar en nosotros aquello que es indestructible.” 

Pema Chödron