No gusta que nos mientan

   Si, es así, a unos más que a otros; pero todo indica que a todos los seres humanos nos gusta que nos mientan, así sea en pequeños detalles.

  Sino no creemos las mentiras de otros, como mínimo nos creemos nuestras propias mentiras.

  Por ejemplo las mujeres, aunque saben que muchos hombres dicen palabras bonitas, o todo lo que una mujer quiere escuchar, con la simple y única intención de acostarse con ella. Aun así deciden creer en sus mentiras engañándose a ellas mismas, "creyendo" que ellos si las aman y están dispuestos a “todo” por ellas.

  Aparte del autoengaño-masoquista, tarde o temprano llega el momento en el cual el hombre la desecha, se busca otra, o cualquier cosa. 
Y aquí viene la parte tonta del cuento, estas mujeres aunque desde el primer momento sabían que esto pasaría, y estaban muy consciente del asunto en el que se estaban metiendo, de igual forma se echan a morir en un despecho, y empiezan a buscar algún clavo para ser libre de la tremenda decepción o desilusión, en fin como lo quieras llamar.

  Ahora le toca el turno a los hombres, que por naturaleza se consideran infieles, tratan de llenar su vacio y de sentirse más hombres teniendo cuantas mujeres puedan, entre más mujeres tengan creen que esto los hará feliz de alguna manera. Pero ellos muy bien saben que tener "X" cantidad de mujeres no los hará sentir completos, seguirán sientiendose vacíos y querrán ser amados y no solo los mas deseados. Así que ¿Cual es el miedo al compromiso y a decidir enseriarse con una sola mujer?

-Ruth

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